El running y yo volvimos otra vez

La verdad es que este título hace referencia a una frase que leí en la columna de una chica corredora que escribe para una revista de moda, algo así como “el running es ese wey con el que siempre vuelvo”, me cayeron tantas verdades cuando la leí que lo único que pude hacer fue reírme de mi misma, ¡porque es verdad!, mi relación con este deporte ha sido en los últimos años un ir y venir, lo bueno es que no es una relación toxica, por el contrario, es fantástica.

Tres años, una lesión, un maratón no terminado y una pandemia:

En cuanto a esta vuelta a escena lo resumo en esos cuatro puntos, aunque claro que hubo muchas cosas más en el inter de cada una, ahora sé que hay tiempos para diferentes cosas en esta vida, uno no puede andar cargando con tanta exigencia propia.  

En 2017 hice mi último maratón y hasta hace un año todavía me parecía un delito de mi parte, pues cómo dejé pasar tanto tiempo.  Aunque de raíz nunca solté el correr siempre me di mis escapadas esporádicas, solo no hice carreras; me pasaron muchas cosas y tuve que enfocarme en lo esencial e inmediato.

Para 2018 quise darme un break al iniciar el año, venía haciendo un maratón anual (poco para algunos) pero para mi suficiente física y mentalmente. Me inscribí a un medio maratón y un maratón pero no pude hacer ninguno gracias a la fascitis plantar que me dio con todo. Entonces me enfoque en recuperarme y para ese padecimiento no hay mas que el descanso y no correr largas distancias. Casi al final del 2018 me inscribí a Berlín 2019 porque pues ya me había tomado un año de no hacer carreras y porque sentía que ya estaría un poco más recuperada.

Inicie el 2019 motivada por el viaje y entrenamiento para el otoño, pero la motivación que no viene acompañada de una rutina y de buenos hábitos acaba por esfumarse en un segundo. Eso fue lo que paso aunado a que ya tenía muchas más responsabilidades en mi trabajo y me deje atrapar por el estrés y el burnout. Ahora le tomo mucho sentido a esta frase de Eliud Kipchoge: ”Solo los disciplinados en la vida son libres. Si eres indisciplinado, eres un esclavo de tus estados de ánimo y de tus pasiones “.

Ya casi llegaba el mes en que tenía que iniciar mi entrenamiento a Berlín y yo seguía atrapadilla en mil cosas más, hasta que leí la columna de esa chica que les comenté al principio y taran… como por arte de magia regreso a mi esa chispa. Inicie y me tomo por lo menos hasta finales de junio empezar a hacer distancias, pero los planes serían muy distintos todavía.

A finales de agosto del 2019 se murió mi mejor amiga en un accidente y la vida se me nublo, tarde poco más de un mes en recuperar el sabor de cada día, me peleé un tanto con la vida como nunca lo había hecho, creo que por primera vez viví un duelo por un ser querido a un nivel que hasta la fecha duele, pero que reconforta su recuerdo y todas las cosas que vivimos juntas. Denisse mi compañera de nombre fue y será mi hermana por elección para siempre.

En ese inter pare de nuevo por completo y pensé cancelar el viaje a Berlín, pero mi mamá, amigos y novio me ayudaron a elegir hacer el viaje aunque fuera muy probable que no llegara a la meta, ellos sabían que sería un forma de cartarsis. Así fue y estoy feliz de haber iniciado esa carrera y dedicado a ella los casi 24 km a los que mi cuerpo y mente pudieron llegar.

2020 es historia, la pandemia nos cambio los planes y la forma conocida de vivir para siempre, pues, aunque regresemos a lo habitual quiero pensar que cuando lo hagamos seremos nuevas personas y valoraremos mucho más todo. El 2020 me trajo muchas cosas buenas, un nuevo hogar, un nuevo empleo y me regreso a las carreras; aunque no fue en masa me inscribí a un maratón virtual que podías hacer en un rango de días estimado y eligiendo espacios seguros, no es lo mismo, pero me ayudo a volver a esto que me encanta.

Este 2021 solo espero poder seguir sumando km de forma segura, porque sé que es el ejercicio, la disciplina, la pasión que elegí y que me hace bien… ¡El running y yo volvimos otra vez!

Den.

#CorrerMeTrajoAquí